El objetivo del proyecto es ejecutar la primera fase del futuro PARQUE URBANO SANTA BARBARA en Urretxu. Los actuales equipamientos públicos del parque han quedado obsoletos para que el entorno funcione como atractor de actividades diversas. La zona en cuestión se utiliza en días muy puntuales durante el año.
El proyecto se centra en la recuperación del equipamiento público y la puesta en valor de la ermita. Se trata del elemento más antiguo e importante que da nombre al lugar y su entorno.
El proyecto de bar y albergue es parte de una actuación de mayor escala que corresponde a la creación de un parque urbano alrededor de la ermita de Santa Barbara. El siguiente proyecto por lo tanto toma en consideración las líneas estratégicas adoptadas para el desarrollo del futuro parque urbano. La propuesta de mayor calado y que mejora de manera notable el uso del edificio es el cambio de circulaciones rodadas de vehículos a la zona perimetral del parque: De esta manera el entorno del equipamiento social se convierte en un lugar para el disfrute, el ocio, formación y el encuentro de los diferentes usuarios del parque. Se decide intensificar los usos alrededor de la ermita, donde ya existía la anterior edificación y se libera a las zonas naturales y de mayor valor paisajístico del parque de pequeñas construcciones e instalaciones existentes.
El edificio a rehabilitar consta de dos partes. Una estructura de hormigón adosada al muro de piedra de la ermita al oeste, y unas estructuras de madera que conforman la galería y el pórtico hacia el sur. Son estas últimas las que presentan problemas de estabilidad estructural para un uso de pública concurrencia.
La ermita no se toca, se descubre ligeramente. Para ello se interviene en el porche. El actual estado de su estructura del mismo conlleva a una nueva reestructuración del porche tratando de recuperar la función de uno de los elementos más importantes, usados y apreciados por los usuarios de Sta. Barbara.
El edificio propuesto pretende aprovechar las diferentes formas del paisaje que encuentra alrededor para solucionar formalmente diversos accesos para las dos plantas. El pórtico reduce su longitud para dar protagonismo a la ermita y se diferencia de ella en cuanto al material y a su aspecto ligero. Se han utilizado materiales reciclables y procesos constructivos industrializados y lo más desmontables posibles.